Ylana no llegó a tiempo de nacer en un hospital, ni si quiera en una ambulancia. Su madre se vio sorprendida al ponerse de parto repentinamente y pidió ayuda, lo primero que llegó fue un cambión de bomberos que se dispuso a trasladarles desde su vivienda, en San Juan de Luz, hasta el hospital de Bayona.

Las contracciones de la mujer -madre de otros cuatro niños- eran demasiado fuertes, así que el camión paró frente a la comisaría de la ciudad vasco-francesa.

Todo ocurrió el pasado viernes, pasada la medianoche. Para cuando llegó la ambulancia el bebé, Ylana, ya había nacido. No habían pasado ni 20 minutos desde que los padres contactaron con el teléfono de emergencias.

Los bomberos que atendieron a la mujer estuvieron en contacto continuo con los servicios médicos, por lo que pudieron hacer de improvisadas matronas. «No es algo que nos suceda todos los días, pero estamos preparados para este tipo de intervenciones.

Cuando llegaron los sanitarios solamente tuvieron que encargarse del traslado, ya con más calma, al hospital de Bayona, ya que la atención a parturientas no existe en San Juan de Luz desde 2000.

El padre de la criatura ha señalado que toda la familia se encuentra en perfectas condiciones.

Fuente : www.diariovasco.com

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