Madrid.- El Cuerpo de Bomberos de Madrid ha incorporado recientemente 25 nuevos vehículos pesados a su flota. Se trata de siete bombas urbanas pesadas, otras siete ligeras, cinco bombas forestales, cuatro tanques con capacidad para 6.500 litros y dos escalas articuladas y telescópicas de 32 metros. En realidad, los primeros cuatro vehículos pesados se recibieron el pasado mes de agosto y, posteriormente, se han ido incorporando al servicio el resto de las unidades hasta completarse recientemente la recepción de la totalidad de los nuevos vehículos adquiridos, que han supuesto una inversión de 11 millones de euros.

El subinspector de Organización Interna del Cuerpo de Bomberos, Antonio Marchesi, explica que “ha sido una oportunidad para renovar algunos vehículos e intentar mejorarlos en diversos aspectos que consideramos necesarios”. El tamaño ha sido uno de los factores a tener en cuenta. “Estamos intentando diseñar y conseguir vehículos de bomberos de menor tamaño y un mejor radio de giro, algo para nosotros muy importante para poder acceder a lugares donde las intervenciones a veces son muy dificultosas debido al gran tamaño de los camiones”.

Otro de los aspectos que se ha tenido en cuenta es la tecnología de los vehículos. El subinspector apunta que “estamos implantando nuevos sistemas tecnológicos, especialmente en las cabinas, orientados a mejorar la navegación y la seguridad”. Así, los nuevos vehículos incorporan una cámara 360º que les permite ver en todo momento el entorno en una pantalla, “algo que permitirá evitar golpes y accidentes”. Además, los nuevos camiones tienen en cuenta el ahorro energético. “Los sistemas de iluminación se han mejorado, lo cual nos facilita muchísimo el trabajo nocturno y, además, las luces de todos los armarios, así como de las zonas de trabajo exteriores, son led”, explica Marchesi.