Buenos Aires.- El foco ígneo, según personal que trabajó en el lugar, habría sido originado por un cortocircuito, y rápidamente se expandió en torno a las cuatro propiedades.

En consecuencia, las casillas se convirtieron en cenizas en apenas minutos, al tiempo que las familias que las habitaban, entre ellos varios niños, alcanzaron a resguardar sus vidas sin poder salvar sus pertenencias.

Para tratar de repeler las llamaradas intervinieron en primera instancia vecinos y policías desesperados ante semejante panorama, pero más allá de la voluntad poco pudieron hacer.

Después se hicieron presentes dotaciones de bomberos de Los Hornos, uno de ellos incluso resultó herido en medio del operativo y debió ser asistido en el hospital Alejandro Korn de Melchor Romero.

“Cuando llegaron los bomberos ya estaba todo quemado. Lo lamentable de todo esto es que el cuartel de bomberos de está localidad tiene la autobomba rota”, hizo saber un vecino que trabajó a la par de los uniformados.

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