Las carencias dejan prácticamente fuera de combate a los bomberos en el estado Lara, sobre todo en el municipio Palavecino, en donde el parque automotor está paralizado. Son 11 vehículos varados por falta de repuestos, baterías y cauchos. La nómina tiene apenas 28 bomberos y según estándares internacionales debe ser uno por cada mil habitantes. Aunado el personal bomberil no dispone de los equipos de protección personal.

“Uno aquí lo que hace es llevar regaño de la gente cuando viene a solicitar un servicio, por ejemplo en caso de colisión y no podemos auxiliar, porque no hay ambulancia”, se comenta. Los dos carros cisterna, la unidad de rescate y las ambulancias están dañados. En la actualidad, la situación se agrava por la escasez de repuestos y cauchos más la inflación asfixia a estas instituciones, se conoció. En dos oportunidades se intentó hablar personalmente con Novar Martínez, comandante del Cuerpo de Bomberos de Palavecino, pero estaba en reunión. Telefónicamente tampoco se ubicó.

Rafael Yánez esperaba, el pasado miércoles en el sitio para trasladar a un funcionario que haría la inspección de un árbol, pero andaba haciendo el servicio en otro lugar, pues él es el único que hace ese trabajo, expresó que “en épocas de vacas gordas, el Gobierno no invirtió en los Cuerpos de Bomberos y ahora el grado de vulnerabilidad de la población es mayor al momento un siniestro, “Dios nos ampare”, porque el estado Lara es considerado zona sísmica, reflexiona.

Los bomberos del municipio Morán tienen en común con sus colegas de Palavecino que tampoco cuentan con ambulancia ni carro cistena para extinguir el fuego. Félix Linárez, comandante del Cuerpo de Bomberos, quien detalla que de los seis que conforman la flota, tres requieren motor y el resto funciona “más o menos”. De las dos ambulancias funciona una y a uno de los carros le falta el cambio de aceite que ronda los mil 700 bolívares. Se le compró un filtro que vale Bs. 5.800.

El déficit de personal es evidente, en estos momentos cuentan con 20 funcionarios y la jurisdicción tiene 144 mil habitantes.

Para sobrevivir han tenido que cobrar por servicios que no son de emergencia. Por ejemplo las inspecciones por las cuales se cobra el equivalente a 10 Unidades Tributarias. Finalmente, expuso que cuando necesitan “piden auxilio” al Cuerpo Bomberos del municipio Jiménez.

Sin embargo, el comandante del citado ente, Oscar Peraza, manifiesta que están siempre prestos al llamado, pero actualmente no disponen del mínimo equipo para atender una contingencia, ya que las dos ambulancias están fuera de servicio, el camión de supresión o “camión bomba” también está dañado, en total la flota son cinco carros y funciona uno que es de uso oficial. La causa de la paralización son los repuestos, cauchos y baterías, por esa razón, a partir de las 6:00 p.m. permanece un camión cisterna enviado por la Alcaldía de Jiménez, apunta.

En Carora, el Cuerpo de Bomberos funciona a ‘media máquina’-cuentan con 52 bomberos para una población de 300 mil habitantes. El comandante del ente bomberil, Jhonny Túa, expresa que están operativos un carro de supresión, uno de rescate y dos ambulancias, finalizó.
No obstante, se conoció que siempre requieren el apoyo de Protección Civil para el traslado, ya que con frecuencia se registran accidentes en vías.

En Iribarren

El el caso del municipio Iribarren, Edixon López, comandante del Cuerpo de Bomberos en la jurisdicción, refiere que las cuatro ambulancias están paradas desde diciembre por falta de cauchos y baterías. Además, la escasez de repuestos, los vehículos son de vieja data, incluso hay carros del año 1974. La última adquisición fue en 2007 refiere.

Reconoce que en la medida que las circunstancias lo permiten, se ha venido recuperando el parque automotor, en la actualidad están operativas tres ambulancias, una de éstas adscrita a la estación del oeste, detalla. “Ninguna institución de servicio público escapa de estas deficiencias”, apunta, Protección Civil está igual. Comenta que en días pasados acudieron a un sitio para hacer un rescate y cuando llegaron a la clínica ubicada en el centro de Barquisimeto se explotó el caucho. Es un riesgo, advierte.

El año pasado 80% del parque automotor estaba paralizado, en la actualidad podemos decir que 60% está operativo. No escondemos nada, la inflación se devora el presupuesto que hace dos años era de 600 mil bolívares y en 2015 fue incrementado a 25 millones de bolívares con el ánimo de ir recuperando los vehículos. De hecho, se repararon tres unidades entre las cuales hay un camión cisterna y uno de supresión. La capacidad de una gandola es de 35 mil litros y un cisterna ocho mil litros y Barquisimeto debería disponer de ocho camiones similares.

Actualmente se repotencian siete unidades, entre éstas tres carros de supresión. Los bomberos de Iribarren cubre además Crespo, Andrés Eloy Blanco y apoya a Palavecino.

Fuente y foto: www.elinformador.com.ve