Se trata de un viejo anhelo de los vecinos. Hasta ahora debían acudir desde Plottier o Neuquén.

Luego de dos años de espera, Las Perlas ya cuenta con su propio cuartel de bomberos voluntarios, el cual funcionará durante 24 horas y promete hacer frente a cualquier tipo de emergencia de manera inmediata.

El presidente de la institución local, Raúl Vena, remarcó la importancia de la obra por significar un gran avance para el paraje cipoleño y contemplar el nivel de necesidades que tienen sus habitantes en la actualidad.

En el año 2007 un grupo de vecinos armó una mesa de trabajo con el objetivo de resguardar la seguridad de sus familias y combatir incendios que, lamentablemente, aún hoy son muy frecuentes en esa zona. La responsabilidad recayó sobre los hombros de dos bomberos, Campos y Carrizo, quienes hicieron todo lo posible para que el proyecto se sostuviera con el paso del tiempo y así terminar con éxito su misión.

7 bomberos hay actualmente en el paraje Las Perlas. Además, hay cuatro efectivos policiales. Aseguran que el objetivo en el corto plazo es capacitar a ocho más para poder brindar un mejor servicio en un paraje que crece cada día.

En el 2013 la comisión comenzó a acercarse a ellos; llevaron indumentaria nueva, equipos de protección y todo debió ser guardado dentro de casas de familia. “De ahí, entre el Rotary Club y el Municipio se les compró un camioncito viejo y se fue avanzando poco a poco”, explicó el presidente de la asociación de Bomberos Voluntarios.

Sin embargo, para el año 2015, ya bajo la gestión de Vena, el sueño de construir un destacamento perlense se convirtió, poco a poco, en realidad. Ponerlo en pie tomó 27 meses, pero los resultados compensaron el tiempo, la espera y la incertidumbre. Fue realizado con materiales de primera calidad “para estar al nivel que los ciudadanos se merecen” y tiene una superficie total de 400 metros cuadrados.

Cuenta con un parque automotor que alberga un camión cisterna, un autobomba y una camioneta Ford Ranger que cumplirá con la función de servicio forestal. Por otra parte, el primer piso está compuesto por un espacio de cambio de indumentaria, una cocina comedor, dos baños, una sala de estar, una guardia y un dormitorio para policías con escalafón bomberos. En el piso superior, se construyeron dos piezas más para los voluntarios y una sala de 45 metros cuadrados para capacitaciones.

Tardaban 40 minutos en llegar

“En los últimos años hubo alrededor de 30 incendios porque es una zona con mucha maleza y todavía hay casas muy precarias. Cuando teníamos que asistir desde Cipolletti tardábamos 40 minutos y a veces hasta una hora, por eso le agradecemos a la gente de Plottier y Neuquén que nos han cuidado las espaldas muchas veces”, expresó Vena.

Hoy el barrio tiene a disposición siete bomberos de Las Perlas, se anexaron a cuatro efectivos policiales para cubrir las guardias permanentes y planean capacitar a ocho más el próximo año para llegar a un número total de 19 para conformar al equipo.

Financiación – El esfuerzo de la institución

Para finalizar las obras se usaron fondos del cuartel de Cipolletti que recibe, por año, un aporte de Nación destinado a equipamientos y rodados. También se valieron del aporte de la Lotería, Edersa y la taza voluntaria de coparticipación de los vecinos. “Dividimos los recursos y destinamos una parte para la localidad y otra para Las Perlas, por esto tardamos dos años y tres meses casi, por una cuestión de números y porque queríamos que nos cerrara todo. Queremos que la gente sepa en qué se usa el dinero. Este logro fue una caricia al alma y ahora estamos motivados para ir por más”, dijo Raúl Vena.

fuente : www.fm963.com.ar